Era el día anterior al comienzo de la primavera.
Margot salió a su balcón. Ya no vivía en un sucucho en un barrio de mala muerte.
Este departamento estaba ubicado frente al parque de la ciudad, una linda vista, el aire llegaba con olor a verde.
Se apoyó en la baranda, prendió su primer cigarrillo del día, como siempre, cuando despertó Alexander ya no estaba.
Había lloviznado y el olor a tierra mojada inundaba su nariz, suspiró.
Había descubierto a que se dedicaba Alexander, realmente se sentía un justiciero. Y ella una idiota, por haberse creido el cuento de hombre exitoso, en realidad lo era, pero no en lo que ella había creido!
Exhalo lentamente por la boca, una pequeña nube iba saliendo de entre sus labios.
De todas formas ya no había vuelta atras, él, siendo lo que era, seguía siendo lo qmejor que había ocurrido en su patética vida, incluso ese departamento bonito era pagado por él.
Por lejos era el mejor amante que conoció en su vida y había conocido muchos hombres!
Además estaba la vieja loca, no era tan vieja, pero no la aguantaba, todos esos años junto a Alexander y nunca sospecho nada, nunco vio el brillo en su mirada. Su ingenuidad constante le resultaba intolerante, lo que peor le caía era que todavía compartían la cama.
Con respecto al niño, Baldwing no era más que una molestia para ella. Un niñito un tanto sádico, como su padre, pensó, pero sus rasgos eran como los de la madre, no era nada agraciado.
Lo había terminado, tiro la colilla y la vió caer sobre el paraguas de un transeute.
Se fue a duchar y a cambíar, debía ir a la oficina a traducir aquellos textos...
Por lejos era el mejor amante que conoció en su vida y había conocido muchos hombres!
ResponderEliminarMe melancolizo ....sera esto? noc, igual me gusta como escribis
Una buena cama mantiene muchas relacciones.
ResponderEliminarChapeaux entonces si es lo mejor q pudo conseguir ;)
ResponderEliminarBesos